Si alguien dudaba de la reacción del Sevilla tras la derrota en La Coruña, lo visto en Alemania ha dejado claro que los nervionenses no se 'comen la cabeza' y salen en cada partido a ganar sin pensar en nada más allá.
Si hay partidos en los que los sevillistas arrollan a su rival, en el de esta noche han tirado de practicidad para batir a un Stuttgart tan voluntarioso como falto de pegada a la hora de encarar la meta rival. Así, los hombres de Markus Babbel se lanzaron a por el gol desde el pitido inicial buscando sobre todo las entradas por banda de sus laterales. Muchas llegadas pero poco peligro, porque aunque los centros al área se sucedían, también es verdad que ninguno de ellos encontraba rematador.